En una entrada anterior sobre psicología infantil en Gijón te contábamos a modo de introducción qué es el bullying o acoso en grupo, y te dábamos algunas pistas para proteger de él a nuestro hijo o hija.
Vamos a especificar hoy un poco más los motivos de alarma con que podemos encontrarnos, para no confundirlos con otros obstáculos o trastornos con los que se pueden topar, y poder poner remedio lo antes posible.
Cuando el ataque es continuado y el pequeño sufre una marginación o un asedio que llega a afectar a su personalidad hay que saber diferenciarlo de una simple pelea entre niños. Para eso lo más importante es comunicarnos con él y hacerle sentir que puede contarnos todo sin ser juzgado o culpado por ello.
En los centros de psicología infantil en Gijón vemos algunos casos en que los padres no identificaron estas señales:
- Cambios de humor excesivos, distintos a lo habitual y aparentemente sin motivo.
- Trastornos de sueño. Puede que se despierten o que tengan pesadillas, y es posible que no digan lo que sienten por vergüenza. Cuidado con presionarles y empeorar la situación.
- Se quejan de dolores sin causa aparente. Quizá les duele un día el estómago y otros la cabeza, evitan como sea ir al colegio, y llega a dolerles de verdad, a causa de la tensión.
También suelen bajar su rendimiento académico y tienen más dificultades que antes para concentrarse.
Pueden parecer síntomas difusos, pero cuando empeoran y coinciden todos a la vez, hay motivos para preocuparse. Habla con él o ella y si lo necesitas contacta con el Gabinete Psicológico Romero.